Los secretos de la logística más competitiva

La pandemia y la borrasca Filomena han evidenciado la importancia que la logística y las cadenas de suministro tienen en la actualidad en el ámbito empresarial y en el familiar. Mucho se ha hablado de los riesgos que para asegurar el suministro supone depender en exclusiva de China en innumerables productos. La histórica nevada también dejó clara la necesidad de contar con una estrategia logística poderosa que pueda hacer frente al reto que supuso abastecer al comercio con unas condiciones meteorológicas dantescas.

A la vista de las circunstancias resulta evidente que contar con una buena gestión de la cadena de suministro y la logística, que tenga en cuenta aspectos tan relevantes como el transporte, los envíos o los inventarios, es clave para que una empresa sea competitiva. Sin duda, sin un producto o un servicio adecuado y una buena marca es imposible que un negocio haga dinero. Pero sin una adecuada gestión de todo el factor logística tampoco se podrá lograr nada.

El primer secreto que se debe tener en cuenta a la hora de mejorar en el apartado logístico está en la continua revisión, ya que, como la mayoría de las cosas, las estrategias no son eternas. Lo que era bueno ayer no tiene por qué serlo hoy. Sirva como ejemplo una tienda que hasta la pandemia ignoraba el canal digital pero que para sobrevivir ha abierto una tienda online. Es evidente que las necesidades de inventario o transporte serán ahora completamente diferentes a las de hace solo unos meses.

Pero además de la revisión continua, existen una sería de variables que deben valorarse para lograr que la logística deje de ser uno de los factores de riesgo de cualquier empresa y se convierta en aspecto diferencial frente a la competencia.
 

Aprovechar la tecnología

Adentrarse en la fábrica de Inditex en Arteixo es como atravesar las puertas de la NASA. Enormes equipos informáticos y los últimos sistema de identificación por radiofrecuencia permiten saber con exactitud a la empresa todos los pasos que ha seguido una prenda desde que arrancó en una mesa de diseño hasta que fue adquirida por un cliente de Zara en Buenos Aires o Sídney.

Está claro que la enorme inversión que la textil gallega realiza en logística está al alcance de muy pocos y, desde luego, a años luz de los recursos de una pyme. Pero eso no quiere decir que, en la medida de las posibilidades, la empresa obvie instalar algunas de las múltiples herramientas con bajo coste que existen para mejorar la gestión de la cadena de suministro o de los almacenes propios.

Una adecuada gestión de los inventarios

Los costes de almacenamiento es una de las partidas que más castigan el pasivo de una empresa. De ahí que resulte imprescindible contar con una buena gestión del stock que permita responder siempre a la demanda, acumulando el género el menor tiempo posible en los almacenes. Para ello es necesario anticiparse a las tendencias del mercado y ser proactivo. De hecho, una buena estrategia que se utiliza poco en España y sí al otro lado del Atlántico es ceder el riesgo del stock a los propios proveedores convenciéndolos de que sean ellos mismos los que almacenen una parte de los inventarios.

No obstante, la mejor estrategia al respecto pasa por convertir la tienda (da igual que sea física o digital) en auténticos contenedores de información. Con ello, se obtienen los datos necesarios para calcular con mayor exactitud el alcance de la demanda venidera, lo que permitirá reducir de manera importante los costes de almacenamiento.
 

Contar con una buena red de transporte

Independientemente de si el transporte lo realiza la propia empresa o lo externaliza, como hacen gigantes como El Corte Inglés, lo más importante es que la red que se utilice presente estas características: trazabilidad de la cadena de frío y de toda la cadena de suministros, transporte multimodal para facilitar la internacionalización y logística inversa (reciclaje).
 

Asegurar el aprovisionamiento

Tan importante es que los productos o servicios lleguen al cliente en tiempo y forma como que las materias primas estén en la empresa justo cuando se necesitan. Para lograrlo, se debe tener una adecuada gestión con los proveedores. Una buena medida que los emprendedores deben tomar en este sentido que evita desagradables sorpresas en la cadena de suministro es incluir la gestión de las compras en la planificación a largo plazo de la compañía. También resulta positivo mantener reuniones con los proveedores para darles a conocer la estrategia de crecimiento de la compañía. De esa forma, se sentirán también partícipes del negocio y cuidarán el servicio que ofrecen.
 

Valorar los beneficios del outsourcing

Lograr una buena gestión logística es uno de los grandes retos a los que se enfrenta cualquier negocio. Por ello se deben estudiar todas las opciones y, sobre todo, no cerrarse a los beneficios que se pueden obtener de la externalización de parte o de todos los aspectos que se incluyen en el ámbito logístico.