La Cumbre Iberoamericana que acaba de celebrarse en nuestro país ha puesto en valor a las pymes y puede convertirse en un espaldarazo que anime a las pequeñas y medianas empresas españolas a cruzar el ?charco?, por si alguna todavía albergaba dudas. Todos los dirigentes políticos que se reunieron en Cádiz son conscientes de que si en la pasada década aterrizaron las grandes empresas españolas en América Latina, en la actual lo hará un gran número de pymes, que podrán participar en el desarrollo de múltiples infraestructuras. Por de pronto, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) adoptará un papel activo para apoyar a las pymes iberoamericanas a internacionalizarse y crear empleo, como dijo su presidente, Luis Alberto Moreno, en una entrevista con Efe. Según explicó, las pymes tienen un potente valor en el sector de infraestructuras y el BID puede apoyar a favorecer su implantación. Citó, por ejemplo, que América Latina tiene un déficit de viviendas de interés social cifrado en 52 millones y es un sector en el que apuntó que España tiene mucha capacitación. El BID ofrecerá 70 millones de dólares a bancos comerciales que quieren ampliar sus líneas de financiamiento para que las pymes puedan exportar o invertir en el exterior. También tendrá 350 millones de dólares disponibles para garantías por medio de bancos locales, para las empresas que participen en licitaciones internacionales para la prestación de servicios. La Cumbre de Cádiz se ha volcado en ensalzar el papel que las pequeñas empresas pueden tener en la nueva relación iberoamericana tras una era en la que los intercambios pasaban solo por las grandes firmas. Incluso, el secretario general iberoamericano, Enrique Iglesias, ha asegurado que ?la de Cádiz será recordada como la Cumbre Iberoamericana de las Pymes?, por el apoyo que los gobiernos han prestado a este segmento. Y de las palabras se pasó a los acuerdos. Se fijaron objetivos como mejorar el acceso al crédito y a los servicios financieros, incluso a través de alianzas público-privadas, con el fin de incrementar su productividad, su competitividad, y su internacionalización. Además, se decidió apoyar y facilitar la creación de nuevas empresas, públicas, mixtas o privadas, así como fortalecer las alianzas estratégicas y extender la financiación y certificación de normas de calidad. Según el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, "América Latina ofrece enormes oportunidades a España", país que, según dijo, tiene empresas muy competentes y que pueden asociarse con latinoamericanas, porque "nos entendemos bien" los españoles y los latinoamericanos. En definitiva, una cumbre muy fructífera para las pymes españolas que tienen ahora más cercano el camino hacia los países iberoamericanos. Fuente imagen:
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