Crisis humanitaria

A esto se une el colapso del sistema sanitario, como consecuencia de la falta de medicamentos y combustible. Preocupa, además, el agravamiento de la crisis humanitaria, debido al bloqueo efectuado por el ejército hebreo. El director de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA, por sus siglas en inglés), Thomas White, señaló que “la ayuda humanitaria que llega actualmente a Egipto -alrededor de 12 camiones al día- es insuficiente para cubrir la supervivencia básica de una población de dos millones de habitantes”. En medio del caos, se teme que la escasez de alimentos básicos y agua potable provoque el desmoronamiento del orden civil, un riesgo que ha comenzado a materializarse después de que miles de gazatíes asaltaran en las últimas horas los almacenes de productos básicos de las ONG, un comportamiento desesperado que complica, más si cabe, la labor efectuada por las organizaciones humanitarias. En este contexto, el pasado 27 de octubre la Asamblea General de Naciones Unidas aprobó, con 120 votos a favor, 14 en contra y 45 abstenciones, una resolución en la que solicita la liberación inmediata e incondicional de los civiles secuestrados; el suministro de forma “continua, suficiente y sin obstáculos” de bienes y servicios básicos a la Franja; y el establecimiento de una tregua humanitaria inmediata.