Comienza el alto el fuego

En estos quince meses de conflicto han fallecido en el enclave al menos 46.000 personas. El acuerdo, alcanzado en Doha con la mediación de Catar y Estados Unidos, se basa en el plan propuesto por la administración de Joe Biden en mayo de 2024. El alto el fuego consta de tres fases. En la primera de ellas la milicia Hamás se ha comprometido a liberar a 33 rehenes de forma escalonada durante las próximas seis semanas. Por su parte, Israel liberará a cientos de palestinos arrestados, iniciará la retirada del ejército, permitirá el regreso de la población gazatí al norte de la Franja, y flexibilizará la entrada de ayuda humanitaria por el paso fronterizo de Rafah. La segunda fase del acuerdo contempla la liberación, por parte de Hamás, de todos los secuestrados y la entrega de los cuerpos de los rehenes fallecidos. A cambio Israel liberará a varios centenares de presos palestinos y se retirará de la Franja, a excepción de una zona de seguridad de cerca de un kilómetro de ancho a lo largo de toda la frontera. La tercera y última fase incluye la devolución de todos los prisioneros restantes y la reconstrucción de Gaza, un proceso que podría costar entre 40.000-50.000 millones de dólares, según los cálculos de la ONU. A cierre de estas líneas la primera jornada del alto el fuego ha transcurrido sin incidencias. Hamás ha liberado a tres rehenes hebreos, a cambio de 90 prisioneros palestinos. En las primeras 24 horas han entrado en el enclave más de 600 camiones de ayuda humanitaria, una cifra que supera con creces los cerca de 72 camiones diarios que entraron en la Franja en el último mes. A partir de ahora la gran incógnita es si las tres fases del acuerdo llegarán a materializarse, dada la elevada probabilidad de que algunas de las partes incumplan sus compromisos. En el lado positivo, el alto el fuego supone, sin obviar los numerosos desafíos que persisten, el principio del fin de una guerra que, en quince meses, ha desencadenado distorsiones y consecuencias a lo largo de Oriente Medio que parecían impensables.