07 may 2023
El Partido Colorado acumula todo el poder
El candidato oficialista del Partido Colorado, Santiago Peña, ha ganado las elecciones celebradas el pasado 30 de abril con una amplia ventaja y se convertirá en el nuevo presidente del país a partir del próximo 15 de agosto, por un período de cinco años.
Con el 99% de los votos escrutados, ha obtenido casi el 43% de los votos, muy por delante de Efraín Alegre, con el 27,4% y de Payo Cubas, con el 23%. El Partido Colorado ha gobernado Paraguay durante más de 70 años. Peña, un economista de 44 años educado en Estados Unidos, se unió al partido en 2016 y fue ministro de Hacienda en el gobierno de Abdo Benítez. El oficialismo contará, además, con mayoría en ambas cámaras y dirigirá 15 de las 17 gobernaciones del país. El electorado parece haber premiado la trayectoria macroeconómica de Paraguay, que destaca como uno de los países latinoamericanos con mayor crecimiento del PIB en lo que va del siglo, apoyado en la exportación de soja y en un marco de disciplina fiscal, reducida deuda y controlada inflación. Sin embargo, en el lado negativo, que sugería una elección más ajustada, Paraguay sigue enfrentando problemas sociales persistentes, como profundas desigualdades entre las clases sociales, un mercado laboral con elevada informalidad y falta de protección en áreas cruciales como la salud y la educación.
│Acusaciones de fraude electoral
Asunción ha sido escenario la semana pasada de graves incidentes entre la policía y opositores al Partido Colorado que denuncian un "fraude monumental" en las elecciones. Los manifestantes se concentraron frente al Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE) y fueron dispersados con gases lacrimógenos cuando intentaban invadir el edificio. Las protestas se extendieron por todo el país con cortes de carreteras y pequeñas manifestaciones en las principales ciudades. La Policía Nacional de Paraguay ha informado de la detención de más de 200 personas. El candidato Payo Cubas, quien acabo en tercer lugar, ha liderado las marchas. Solicita una auditoría internacional de las urnas electrónicas y el conteo manual del 10% de las mesas. Los resultados electorales fueron avalados por los observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA).