15 ene 2023
Japón estrecha alianzas militares frente a China
Rishi Sunak, primer ministro británico, y su homólogo japonés, Fumio Kishida, firmaron el pasado 11 de enero un acuerdo de defensa que permitirá al Reino Unido y a Japón desplegar fuerzas en sus respectivos países.
Al día siguiente, Japón anunció la ampliación de su alianza con EE.UU. al ámbito espacial. Un ataque a cualquiera de sus satélites permitiría ahora invocar el artículo 5 de su alianza que habilita la defensa mutua. Estos anuncios responden evidentemente al intento de los gobiernos occidentales de reforzar su compromiso en la región de Asia-Pacífico con el objetivo de contrarrestar la amenaza que supone el creciente despliegue naval chino en la región. Intentan enviar de paso el mensaje a Pekín de que la guerra de Ucrania no está desviando su atención y disuadirlo así de una invasión de Taiwán. Por parte de Japón esto no hace sino confirmar el drástico cambio de rumbo en su política de defensa tomado en los últimos meses. El pasado mes de diciembre Tokio expuso sus ambiciones de desempeñar un papel más activo en la seguridad regional, en un “nuevo equilibrio en las relaciones internacionales" trabajando más estrechamente con Estados Unidos y sus aliados para lograr "un Indo-Pacífico libre y abierto". La realidad es que Japón ha abandonado oficialmente la política pacifista adoptada tras el fin de la Segunda Guerra Mundial aprobando uno de los mayores presupuestos de defensa del mundo con el objetivo explícito de contrarrestar "un desafío estratégico sin precedentes". "Reforzaremos fundamentalmente las capacidades de defensa como la última garantía de la seguridad nacional" anunciaba el ejecutivo, poniendo fin a seis décadas de política de defensa basada en la práctica desmilitarización del país.