Paquete de ayuda

Kiev recibirá la mayor parte del mismo (61.000 mill.$), que incluye ayuda económica y armamento para enfrentar la ofensiva rusa. Se aprobó con una mayoría bipartidista de 311 votos a favor y 112 en contra, tras más de seis meses de bloqueo. De hecho, para sacar adelante el paquete, el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Mike Johnson, se enfrentó al ala más radical de su partido. Algunos republicanos amenazaron con destituirlo, tal como ocurrió con su predecesor en el cargo, Kevin McCarthy. Trump también dio su bendición tácita ya que los congresistas incorporaron una de sus propuestas: calificar la ayuda económica al gobierno de Ucrania como préstamo en lugar de subvención. De esta forma, de los 61.000 mill.$, Kiev tendrá que devolver 10.000 millones, pero también se incluye una cláusula que permite al presidente perdonar esos préstamos a partir de 2026. Además, bajo el proyecto de ley, Estados Unidos puede confiscar y vender activos rusos y entregar el dinero a Ucrania para la reconstrucción, otro de los puntos más conflictivos. Las consecuencias para Ucrania serán casi inmediatas. El Pentágono podría empezar a enviar proyectiles a Ucrania en dos semanas, pero los sistemas de armamento más grandes tardarán mucho más. La esperanza es que lleguen a tiempo para que Kiev pueda defenderse de la ofensiva rusa a mayor escala que, según la inteligencia militar ucraniana, comenzará a partir de junio.