24 oct 2021
Problemas en el sector agrícola
Como se esperaba, el vertiginoso aumento de los precios de la energía se está desplazando progresivamente al resto de eslabones de la cadena. Recientemente los precios de los fertilizantes comercializados en Estados Unidos, recogidos en el índice “North American Fertilizer Prices” registraron un máximo histórico, al superar los 996 $ por tonelada.
En términos relativos supone una subida cercana al 300% respecto a los valores de hace un año. Este comportamiento se explica, en buena medida, por el extraordinario encarecimiento del precio del gas, dado que en el caso de los fertilizantes nitrogenados el consumo de esta materia prima representa el 60-80% de los costes de producción. El abrupto aumento de los precios de los abonos se ha convertido en una de las principales preocupaciones del sector agrícola a nivel global. El aumento de los precios es tal que algunos productores estadounidenses están planteando dejar de cultivar maíz, un cereal más intensivo en abono en comparación con otros tipos de plantaciones, como la soja y el trigo. En Vietnam las autoridades han instado a sus productores de arroz a reducir el uso de fertilizantes a la mitad, para atemperar el impacto sobre los precios finales. Y, en el caso de Tailandia, recientemente la Asociación de Agricultores señaló que a día de hoy el precio de una tonelada de fertilizante supera al de la tonelada de arroz, una situación insostenible que conducirá a un notable encarecimiento de los alimentos.