Un presupuesto moderado

El gasto público crecerá un 2%, menos que el 2,7% inicialmente proyectado, tras recortes parlamentarios de cerca de 600 mill.$. Las discusiones presupuestarias estuvieron marcadas por tensiones políticas, incluyendo investigaciones contra altos funcionarios y ajustes en partidas sensibles como los gastos reservados. El presupuesto prioriza áreas clave como seguridad, con la incorporación de más de 1.300 nuevos oficiales a Carabineros y mejoras en infraestructura, y salud, con un aumento del 150% en recursos para reducir tiempos de espera en hospitales. Sin embargo, la financiación de estas medidas dependerá en parte de la Ley de Cumplimiento Tributario, que busca recaudar un 1,5% del PIB, aunque expertos señalan que esta estimación podría ser optimista. En un contexto de bajo crecimiento económico, con proyecciones del FMI de entre 2% y 2,5% para 2025, y una deuda pública cercana al 41,2% del PIB, se anticipa que el próximo gobierno enfrentará restricciones fiscales.