Victoria pírrica de Imran Khan

A pesar de una campaña marcada por las dificultades, de tener a su líder, el ex primer ministro Imran Khan encarcelado, y de verse obligado a presentar a sus candidatos como independientes, el Movimiento por la Justicia de Pakistán (PTI) obtuvo el mayor número de escaños en la Asamblea Nacional (93 escaños de 227). Sin embargo, a pesar de esta sorprendente victoria, este resultado está todavía lejos de los 169 necesarios para gobernar. La Liga Musulmana de Pakistán Nawaz (PML-N) de otro ex primer ministro, Nawaz Sharif, quedó en segundo lugar con 75 escaños. Este partido contaba con el respaldo del poderoso aparato militar del país y se esperaba que se alzara con la victoria. Por último, el Partido Popular de Pakistán (PPP), liderado por Bilawal Bhutto Zardari, quedó tercero con 54 escaños. Se inicia ahora un complejo periodo de negociaciones para formar un gobierno de coalición que, seguramente, estará liderado por estos dos últimos partidos (el PML-N y el PPP). No obstante, los resultados dibujan una Asamblea Nacional muy segmentada, en la que será difícil mantener una mayoría estable. Todo indica, pues, que estas elecciones no van a terminar con la casi interminable crisis política que sufre el país desde hace años. Por otra parte, mientras se negocia un nuevo gobierno, los candidatos independientes que no ganaron han inundado los tribunales con acusaciones de fraude electoral. Al mismo tiempo, los partidarios del PTI han organizado protestas en todo el país ante las sedes de la Comisión Nacional Electoral.