07 mar 2023
Los riesgos no financieros y sus consecuencias para la empresa
https://www.cesce.es/es/El nuevo problema que enfrenta el sector de banca, incluye riesgos no financieros. Descubre aquí cuales son y cómo pueden afectar.
Si no se tienen en cuenta otros riesgos más allá de los estrictamente financieros, como el reputacional, las ciberamenazas o una mala gestión de la liquidez, las consecuencias negativas para una empresa pueden ser muy importantes. La planificación y el análisis de potenciales escenarios críticos son bazas decisivas para estar lo mejor preparados posible.
Diferencia entre riesgo no financiero y un riesgo financiero
Quien más quien menos sabe lo que es un riesgo financiero, ya que tienen que ver con, por ejemplo, la inestabilidad de los mercados financieros en el caso de una inversión o la mala gestión en el flujo de caja de una empresa que puede llevar a un sobreendeudamiento. En este segmento, uno de los más habituales para una entidad es el riesgo de crédito, que se produce cuando una de las partes de un contrato financiero no realiza los pagos en el tiempo y la forma estipulados en el contrato, lo que puede derivar en un impago. Para evitar este tipo de situaciones, existen productos como los seguros de crédito, que incluyen la prevención de riesgos, la gestión de recobros y las posibles indemnizaciones que se ocasionen.
Sin embargo, no son tan conocidos, sobre todo entre los responsables de las pymes, los riesgos no financieros, a pesar de que si no son gestionados adecuadamente, pueden tener un efecto negativo muy importante. Desde un punto de vista semántico, un riesgo no financiero es aquel que no tiene que ver con los mercados financieros, con los tipos de interés o con los créditos comerciales. Existen diferentes clases de riesgos no financieros.
Tipos de riesgo no financieros
Hay distintas tipologías de riesgos no financieros, cada una de las cuales es evaluable por separado dentro de cualquier entidad y que te describimos a continuación.
Riesgo no financiero de conducta
Incumplir una ley que atañe directamente a la empresa u ofrecer condiciones abusivas y claramente injustas para los consumidores tienen un efecto nocivo sobre su imagen a medio y largo plazo. En este sentido, siempre es conveniente desarrollar argumentos que justifiquen de cara al exterior cualquier decisión relevante que tenga un impacto en los productos y servicios que una entidad ofrece en el mercado.
Riesgo operacional o de mercado
Aunque es probable incluir este riesgo dentro de los financieros, aquí se analiza bajo la perspectiva de los posibles fallos en los procesos internos o en la gestión de los recursos humanos, y cuya influencia se deja sentir en el comportamiento de la empresa en su mercado de referencia.
Riesgo de crédito
Este riesgo tiene la consideración de financiero, sin embargo, una gran parte de sus consecuencias pueden ser no financieras. Si una empresa no ha sabido desarrollar protocolos suficientes para evitar el incremento en las facturas impagadas, es probable que el mercado y sus stakeholders de referencia le penalicen. Por ello, siempre es una buena decisión estudiar con carácter previo la solvencia y el historial comercial de cualquier cliente antes de firmar ninguna clase de acuerdo con él.
Riesgo reputacional
Cualquier acto hecho por una empresa o que tenga una influencia directa en ella tiene un impacto sobre su imagen que es posible analizar. Por ejemplo, un impago comercial afecta a la percepción externa que se tenga de la organización, al igual que la pérdida de popularidad del sector de actividad en el que opera y que influye en su reputación (y, en ocasiones, en su volumen de nuevos contratos o de ventas) a pesar de que no haya sido ‘culpable’ directa de lo ocurrido.
Ciberriesgo
Si bien las ciberamenazas son una práctica habitual de la que casi ninguna organización puede escapar a largo plazo, es importante disponer de protocolos de actuación rápida en el caso de que se sufra un ataque virtual. De este modo, se transmitirá un mensaje positivo y tranquilizador a los stakeholders que tienen relación con la entidad.
Riesgo de liquidez
No disponer de la suficiente tesorería con la que afrontar pagos a corto plazo, como una adquisición o una multa administrativa, hace que la reputación de una compañía se resienta de forma inmediata. Contar con un buen controller financiero o, si es posible, con un CFO, minimiza de manera considerable esta amenaza.
Cómo prevenir los riesgos no financieros
Aunque no existe una receta mágica para evitar en la medida de lo posible un riesgo no financiero, sí que es factible diseñar una estrategia para minimizar su impacto e intentar ofrecer una réplica temprana que contribuya positivamente en la imagen de la organización. Esta estrategia debe contener:
- Una identificación de posibles eventos no financieros que podrían impactar en la organización.
- Una evaluación individualizada de cada riesgo, con diversos escenarios que ejemplifiquen los potenciales grados de impacto sobre la compañía.
- Un análisis de los niveles de tolerancia a los riesgos de la empresa, procurando aportar respuestas a cada uno de los riesgos no financieros identificados.
Esta información se comparte en Asesores de Pymes por la relevancia para las empresas españolas. No necesariamente los productos y servicios que se recomiendan en este blog son ofrecidos por Cesce. Para conocer en detalle el portafolio de productos que ofrece la compañía, puede hacerlo entrando en cesce.es.
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