11 abr 2021
Ambicioso plan de infraestructuras
El nuevo inquilino de la Casa Blanca, Joe Biden, ha llegado dispuesto a transformar la economía estadounidense. El demócrata consiguió el respaldo de las dos Cámaras legislativas para su plan de recuperación económica tras la pandemia, valorado en 1,9 bill.$, a comienzos del mes de marzo.
Ahora el nuevo presidente planea una inyección fiscal de 2 bill.$ destinados a modernizar las infraestructuras del país, mitigar la crisis climática y mejorar la competitividad de la economía a través de la inversión pública en investigación y desarrollo. De esta forma, el mandatario trata de poner fin a un largo período en el que la inversión pública ha estado ausente de la agenda política del Ejecutivo. Para financiarlo, la Administración Biden ha propuesto elevar el impuesto de sociedades del 21 al 28%, elevar el impuesto de sociedades mínimo global al 21% o eliminar las partidas de impuestos preferentes para los productores petroleros. Además, se espera que la Casa Blanca anuncie en las próximas semanas un tercer plan de medidas fiscales especialmente enfocadas a educación, sanidad y ayudas sociales, lo que elevaría el importe total por encima de los 3 billones de dólares.