03 jul 2022
Cumbre de la OTAN (II)
La cumbre anual de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) que tuvo lugar en Madrid entre el 28 y el 30 de junio no defraudó. La organización considera a Rusia como “la amenaza más importante y directa para la seguridad de los aliados y para la paz y la estabilidad en la zona euroatlántica”.
Asimismo, el nuevo Concepto Estratégico sitúa a China, por primera vez, como uno de los principales desafíos de la Alianza. Para responder a los riesgos a los que se enfrenta la organización, los 30 miembros acordaron multiplicar por siete (hasta 300.000) los efectivos de la denominada fuerza de respuesta rápida, un contingente que puede desplegarse en cualquier escenario en un plazo de cinco días. Además, Estados Unidos anunció un aumento considerable de su presencia militar en Europa. Entre otros, Washington establecerá un cuartel general permanente para su Quinto Cuerpo del Ejército en Polonia; desplegará 5.000 soldados adicionales en Rumania; aumentará el contingente rotatorio en los estados bálticos; reforzará las defensas antiaéreas en Alemania e Italia y su fuerza naval en la base de Rota. Otro de los principales anuncios fue la invitación formal a Finlandia y Suecia para que se incorporen a la Alianza, una vez que la delegación turca levantó su veto. A cambio, los dos países nórdicos firmaron previamente con Turquía un memorando trilateral, en que se comprometen a hacer cambios legislativos para endurecer su posición con organizaciones como la milicia independentista del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK). Helsinki y Estocolmo también acordaron profundizar la colaboración con Ankara en los procesos de extradición pendientes.