De nuevo golpeado por la violencia

Los guerrilleros asaltaron de madrugada las instalaciones y secuestraron a 42 personas, en su mayoría estudiantes. El gobernador del estado de Níger ha ordenado el cierre inmediato de todas las escuelas de la región, ante el temor de que se produzcan nuevos ataques. Tres días antes, además, otro grupo de hombres armados asaltó un autobús en la misma región y secuestró a una treintena de personas que habían asistido a una boda. Ante el incremento de la violencia, el Senado ha solicitado al presidente, Muhammadu Buhari, la declaración del estado de emergencia en el centro y oeste del país. El secuestro masivo de estudiantes se ha convertido en uno de los principales objetivos de los grupos armados.  Hace dos meses 344 niños fueron raptados en el estado de Katsina. La rápida actuación de las autoridades permitió la liberación de los estudiantes seis días después, tras alcanzar un acuerdo con los secuestradores. El grupo terrorista Boko Haram se atribuyó la autoría de los hechos; sin embargo, la principal hipótesis apunta a uno de las numerosas bandas armadas que actúan en la región. Eso no excluye, no obstante, la posibilidad de que pueda existir algún tipo de vínculo con la organización yihadista.