Inesperada contracción

Se trata de la primera reducción del PIB desde que la pandemia golpease el país hace ahora dos años. La inflación, que ha ascendido al 7,8% en dicho período, la expansión de la variante ómicron y el impacto de la guerra de Ucrania sobre las cadenas de suministro globales, explican el inesperado retroceso del PIB. Sin embargo, la economía estadounidense aún sigue mostrando signos de resistencia con la creación de 1,7 millones de puestos de trabajo y el incremento del 5% de la producción industrial durante los 3 primeros meses del año. No obstante, todo apunta a una progresiva desaceleración del ritmo de crecimiento en paralelo al endurecimiento de la política monetaria por parte de la Reserva Federal. De hecho, la Fed ya elevó los tipos en 25 puntos básicos en marzo y se espera que en la próxima reunión que tendrá lugar el 3 y 4 mayo lo haga en 50 puntos básicos más.