08 dic 2020
Un acuerdo “de minimis” que satisface a todos
A principios de diciembre de 2020, los 23 países que integran la alianza de productores de crudo conocida como OPEP+, llegaron a un difícil acuerdo, obtenido tras tres días de intensas negociaciones que comenzaron el 27 de noviembre.
Básicamente, el acuerdo consiste en que a partir del próximo uno de enero, la OPEP + elevará la producción de crudo en 500.000 b/d. El acuerdo obliga también a los 23 países productores a reunirse todos los meses ─y ya no semestralmente como antes─ para decidir si aumentan o disminuyen la producción, en función de la evolución de la demanda mundial de crudo. Además, los cambios mensuales en la producción que se decidan no podrán ser superiores a los 500.000 b/d, al alza o a la baja. La OPEP y sus aliados de fuera del cártel recortaron la producción de crudo el pasado mes de abril en 9,7 mill. b/d para hacer frente a la caída de la demanda mundial originada por la pandemia, aunque entonces también se decidió ir gradualmente aumentando la producción en tramos de 2 mill. b/d al compás de la recuperación de la economía mundial. El primer aumento de la producción de 2 mill. b/d tuvo lugar el pasado uno de agosto, y el otro, también de 2 mill. b/, iba a haber tenido lugar el próximo uno de enero. Con el nuevo acuerdo, la producción se seguirá aumentando, pero en sólo medio millón de b/d. Con ello se ha dado satisfacción a aquellos países productores, acaudillados por Arabia Saudí y por Rusia, que consideraban que la demanda mundial de crudo no era aún lo bastante fuerte como para poder absorber un aumento en la producción de 2 mill. b/d. Pero, al mismo tiempo, el acuerdo satisface también a aquél otro grupo de países productores, liderados por los EAU y por Kazajstán, deseosos de abrir los grifos de la producción para volver a recuperar cuota de mercado. Si el acuerdo tardó varios días en llegar fue, sobre todo, por la dura postura mantenida por los EAU en la mesa de negociaciones, rompiendo su tradicional alianza con los saudís. Los EAU, no hay que olvidarlo, llegaron a amenazar veladamente el pasado mes de noviembre con abandonar la OPEP si sus demandas de aumentar la producción no eran escuchadas y satisfechas. Aunque obtenido con fórceps, el nuevo acuerdo reúne, según los expertos, las condiciones para satisfacer a unos y a otros. De hecho, poco después de que se hiciera público el precio del barril de “Brent” llegó a tocar los 50 $/b y aunque después descendió ligeramente, se encuentra en estos momentos en su nivel más alto de los últimos nueve meses.