Cuando comenzó la crisis, el sector del libro lo vio claro: había que acceder a nuevos mercados para que las ventas recuperaran la senda de crecimiento anterior a la misma. Dicho y hecho. Según el ?
Informe de Comercio Exterior del Libro 2011?, presentado por la
Federación Española de Cámaras del Libro, las exportaciones del sector del libro español (que incluye tanto a los sectores editorial como gráfico) alcanzaron los 482,44 millones de euros el pasado año, lo que supone un incremento del 5,38% respecto al ejercicio 2010. Por sectores, las ventas en el exterior del editorial crecieron un 18,88% (fueron de 314,61 millones de euros), mientras que las del gráfico descendieron un 13,1% (se sitúan en 167,83 millones de euros). Por su parte, las importaciones del sector del libro ascendieron a 220,17 millones de euros. La aportación positiva a la balanza comercial española del sector fue de 262,31 millones de euros, frente a los 233,21 millones registrados en 2010, lo que supone un incremento del 11%. Las ventas de libros acapararon el 97% de las exportaciones del sector editorial y el 56% de las del sector gráfico. En cuanto a las importaciones, el 25% correspondieron a libros, el 41% a prensa y revistas, y el 34% a encargos de imprenta y coediciones.
La Unión Europea sigue a la cabeza El principal destino de las exportaciones españolas del sector sigue siendo la Unión Europea, con 304,90 millones de euros, con un incremento del 13,28%. De ellos, 145,10 millones de euros corresponden a las ventas del sector editorial, que se incrementan en un 66,60%. Dentro de Europa, son Francia y Reino Unido quienes ocupan los primeros puestos, con 108,3 y 81,9 millones de euros de facturación, respectivamente. La hipotética medalla de plata sería para América, con 167,97 millones de euros, a pesar de reducirse un 4,77% con respecto a 2010. Un dato: las exportaciones a la zona son, fundamentalmente, libros, mientras que en Europa hay una participación mayoritaria de los fascículos. México, Argentina y Chile son los países donde más se vendió, aunque en el primero se ha registrado una ligera caída. Y en Brasil, uno de los principales países receptores de las exportaciones del sector en otros años, ha sufrido también una caída porque algunas editoriales españolas se han instalado en el país y han trasladado allí su producción.